martes, 7 de febrero de 2012

Decimocuarta entrada: "De amigos y truhanes"


Pues sí que me está costando seguir publicando. No debería estar aquí escribiendo, debería estar estudiando para el examen que tengo el jueves, pero hace ya un par de semanas que ando dandole vueltas más de lo normal a un tema que no quiero dejar de comentar aquí por si algún día vuelvo sobre mis pasos.

Las relaciones interpersonales, ese gran mar de dudas ese gran desierto que no respeta a nadie y que acaba con toda relación carente de valor para ser sinceros y de fuerza para aplicar dicho valor. Llevo una vida -no muy larga, cuento ahora con 26- observando y reflexionando sobre el comportamiento de la gente en sus relaciones personales. Es muy infrecuente econtrarse con una relacion interpersonal que no esté plagada de mentiras, malas intenciones y de engaños, sobretodo de estos últimos.

Es cierto aquello que dice el personaje televisivo House: "Todo el mundo miente". Y no se equivoca, todos mentimos, todos sin excepción, pero no todos mentimos a los mismos tipos de personas ni hacemos uso del mismo tipo de mentiras. Yo les miento a mis familiares, pero son mentiras que tampoco hacen daño a nadie y me evitan conflictos, a estas alturas me siguen preguntando si me he emborrachado o si tengo intención de beber mucho, y qué le contestas en este caso a una madre que ni te has emborrachado y que no tienes intención de beber mucho, esto último es una mentira de las grandes y ella lo sabe pero se queda tranquila y tú sabes que ella hace el esfuerzo de creerselo y quedarse tranquila.

Pero luego vienen las otras mentiras, las que personalmente no tolero ni soporto porque las considero toda una traición. No me cabe en la cabeza el concepto que ayer discutía con Juanma de que todo el mundo comete errores, todo el mundo tropieza con la una traición como consequencia. No nos engañemos, cuando una persona no te busca más que cuando necesita algo de ti y no tiene tiempo para ti ni para un café eso no es un amigo, eso es un interesado. Hacerse llamar amigo y no ser más que un interesado eso es una traición de las que no tolero porque eso es utilizar a la gente y eso señores se hace a conciencia, nadie utiliza a nadie sin querer. 

Cuando una persona te miente y lo hace con la finalidad de no tener una confrontación eso no solo es una traición sino que además es una muestra clara de cobardía. Nadie debe tener a un traidor cobarde por amigo, te dejará tirado con una excusa barata cuando más lo necesites porque las cosas estén feas de verdad, ó simplemente se aprovechará de ti a base de mentiras y más mentiras hasta que te des cuenta.

Llevo algo más de año y medio en Granada y al llegar empecé a establecer relaciones interpersonales con mucha gente, con algunos tengo más contacto que con otros y con muchos más he decidido no seguir teniendo contacto porque me he dado cuenta de cuán intersados son. Cierto es que no soy persona de salir mucho de fiesta, pero sí soy de sentarme con un buen café en una terraza y conversar (nos olvidamos demasiado a menudo de lo útil y placentero de una conversación banal café o cerveza en mano),  y si no es café que sea una cerveza o un vino. Por suerte el tiempo y la experiencia me han enseñado a diferenciar a un tipo de personas de otro y aunque sigo teniendo dificultades para ver la realidad de cuando en cuando he ido haciendo amistades que espero que me duren una vida entera tenga el contacto que tenga que a veces me ayudan a quitarme la venda de los ojos para ver la realidad. 

A estas personas a las que he conocido en Granada les dedico hoy esta entrada y para que no quepa duda de a quienes me refiero les haré un guiño:

Luchi: porque estás como un cencerro a veces pero no te callas una y no dices mentira alguna cuando hablas, porque sí necesito tu ayuda sé que estás ahí, por eso y por mucho más, te quiero y sabes que estaré ahí si me necesitas. 

Lara: sinceramente no sé que decir de tí, mi Heidi murcianita, no hay palabras para tí porque si alguna te hace justicia la ignoro, te echo mucho de menos y te quiero mucho. Espera sí que tengo unas palabras para ti: Vuelve de una puta vez, qué ya lo tienes bien ¿No?

Esther: porque sé que me consideras tu amigo y que el día de mañana si te necesito estarás ahí, gracias.

Raquel: no tenemos tanto contacto como el año pasado por nuestros horarios, pero el año pasado me demostraste que puedo contar contigo y creo que yo a tí tambien. Te hecho de menos rubia, pero despues de exámenes nos debos una "date" café en mano para ponernos al día. Te quiero.

Juanma: eres la más reciente adquisición -No hace ni tres meses que nos conocimos- pero algo me dice que eres un tipo de valor y honor y me alegro de poder meterte en ésta lista. 

Sergio: tan reciente como Juanma y no por ello menos valedor que él, todo un caballero con todas sus consecuencias.

A los que no estáis en esta lista es o porque os quedáis en colegas por no conoceros lo suficiente o porque tal y como os habéis comportado jamás llegaréis a estar en esta lista.


"Lo malo del amigo es que nos dice las cosas desagradables a la cara; el enemigo las dice a nuestras espaldas y como no nos enteramos, nada ocurre" (Louis Charles Aldfred de Musset)

2 comentarios:

  1. Cuando he comenzado a leer la entrada ha sido como: "Joder, cabrón, cómo sabes tocarme en la vena sensible... fingiré que no estoy de acuerdo con tus palabras sólo porque mi orgullo se ve herido" jajajaja.

    Pero, jo, luego he visto la dedicatoria y, ña T///T
    Muchas gracias, sinceramente no me la esperaba... aunque me alegra mucho que me tengas en ese grado de estima ://)
    Yo te prometo que no engañaré! (ni amorosamente tampoco! jamás me iré con otro valenciano ò___ó! <3)

    ResponderEliminar
  2. Jajajajajajajajaja ¡Qué grande eres! con todo lo peque que eres en tamaño. Cómo para no tenerte en tan gran estima, ya sabes lo que te digo en la dedicatoria. ;)

    ResponderEliminar